El joven dirigente explica en esta entrevista cuáles son sus planes durante su periodo de mandato, que será de tres años, y hace un diagnóstico crítico de la ciudad
Por Claudia Bravo | Diario El Centro | 22 de junio de 2014
TALCA.- El pasado 15 de junio la vida de Eduardo Hernández, trabajador social de 27 años y dirigente del sector Faustino González, dio un vuelco positivo. Aquel día se transformó en presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Talca, quizás uno de los más jóvenes que ha ocupado el puesto, un desafío que acepta apoyado por su familia, en el cual se plantea metas claras respecto a qué hacer para generar un cambio importante en la capital regional.
Quiere dedicar el primer semestre de su periodo en hacer un diagnóstico de las necesidades que presentan las juntas de vecinos pues, según sus palabras, lo que ocurra dentro de la comuna afecta directamente a los habitantes de sus distintas poblaciones.
que es injusto lo que ocurre o qué lástima que nadie haga algo, ahí te vas dando cuenta de que hay injusticias que muchos no quieren ver o la visualizan tan a diario que ya pasa a ser algo de la rutina».
¿Cómo surge tu vocación de servicio público?
«Mi vocación nace por un tema familiar, con una vocación social cristiana sú-per fuerte, de familia que en temas valóricos ha sido súper sustancial en mi vida. Mi vocación nace de escuchar a mi madre, que veía las noticias conmigo y me decía
¿A partir de esto te fuiste interiorizando en las necesidades de los barrios?
«Yo vivo en un sector que es conocido como Faustino González o territorio 5 y siempre he estado ahí. Conozco la realidad de los vecinos, es una población bastante humilde que hoy en día es considerada por el Estado como clase media, pero es una población bien humilde y ves de repente la injusticia en los sectores de niños que no comían en el verano a menos que nosotros fuéramos a las colonias, ahí ellos iban a tomar desayuno, a almorzar y estaban solos ellos porque en muchos sectores de Talca los padres son temporeros, la gente humilde trabaja como temporero y los niños se quedan solos en el verano en esos años».
TALCA EN VÍAS DE SER METRÓPOLI ¿Qué sentiste cuándo te dijeron que serías presidente de la Unión Comunal?
«Sentí alegría, sobre todo porque estoy compartiendo con grandes personas el trabajo, ya conocemos como trabajamos, tenemos una decisión de trabajo en equipo más allá de los cargos. Es una gran responsabilidad, creo que Talca es la capital de la región, tiene más de 250 mil habitantes, estamos avanzando a pasos agigantados a ser una metrópoli y con todos los problemas de una metrópoli, o sea con el tema de la contaminación, el conflicto vial, el tema de la desaparición de muchas áreas verdes, el problema de la segregación. Estamos expulsando hacia afuera a muchos vecinos y sobre todo a aquellas personas que fueron afectadas por el terremoto y además tenemos una deuda pendiente en Talca muy grande con los sectores rurales que nos acompañan, Huilquilemu, Huilliborgoa, Aldea Campesina, Panguilemo».
¿Cómo esperas que sea tu relación con el Gobierno Regional?
«He recibido el ofrecimiento para acompañar nuestro trabajo de directores de servicio, de seremis y esperamos también trabajar con la Gobernación de Talca, esperamos trabajar codo a codo con el gobernador Óscar Vega y también con la Municipalidad de Talca, que la unión comunal vuelva a tener una relación con el municipio junto al alcalde durante nuestro trabajo».
¿Cuánto tiempo tienes para llevar a cabo estas ideas?
«Son tres años de gestión, durante el primer semestre pretendemos trabajar solamente en el ámbito del diagnóstico, algunas capacitaciones y el tema de visitar a los vecinos. Son tres cosas las que pretendemos hacer, una es acompañar en algunas capacitaciones y apoyar en algunos proyectos sociales a los vecinos durante este semestre. Trabajar con el diagnóstico, quizás revisando el trabajo de algunas organizaciones que ya han trabajado en diagnósticos como ‘Quiero mi barrio’ v en las poblaciones que falta comenzar a trabajar en el diagnóstico nosotros».